¿Por que cuasi curada de onicofagia?

El año pasado compartí un articulo en google+ según un estudio publicado en Pediatrics realizado en Canada y Nueva Zelanda no es tan malo que los pequeños se muerdan las uñas o se chupen el dedo, ayuda a prevenir alergias. Al parecer mientras mas temprano estén en contacto con las bacterias mas rápido responde el sistema inmunologico haciéndolo fuerte, creas anticuerpos.

Este articulo habría justificado mi manía ante aquellas palabras clásicas de; deja de morderte las uñas. 

Una de las varias cosas que escribí como descripción en mi perfil para el blog fue cuasi curada de onicofagia.

¿Qué es la onicofagia? No es mas que esa terrible manía adquirida por algunos de morderse las uñas.

Recuerdo mis últimos años en la facultad mientras estaba en clases fueron varias ocasiones donde una compañera me decía; "¡deja de comerte las uñas mujer!" "Pero que manía la tuya" o cosas como "te doy las mías también". Desde que tengo uso de razón... eso vendría siendo casi a partir del primer año de primaria (creo yo, quizás segundo, ¿o fue tercero?... de este no pasa seguro) desde ese entonces; fui por la vida mordiéndome las uñas sin temor, ni vergüenza. Adquirí el habito... tal vez, mamá decía que es herencia de papá... no se.

Tuve esa manía hasta los 21, un poquito mas, 22 quizás. Para darle un periodo seria desde los 7, 8 años hasta los 21, 22, eso serian casi 15 años... ¡15 años! ¿haciendo que? Ay muchas cosas wuuuuuu (disculpen, pero me encanto esta frase). Lo cierto es que jamas me detuve a pensar realmente porque lo hacia, mucho menos notar cuantas veces lo hacia, simple y sencillamente cuando me daba cuenta ya tenia los dedos en la boca, no podía evitarlo. Los nervios, la emoción, el no poder llevar siempre conmigo un corta-uña (seguro que esta fue la mía y la de muchos) o el solo hecho de sentir "bien" haciéndolo, era como una especie de relax... que se yo, uno solo lo hace.

Aunque la mayor parte del tiempo no presento para mi ningún problema serio o alarmante, si tuve momentos en los que se me pasaba un poquito la mano y terminaba lastimándome algún dedo, dejándome un leve dolor. Me toco muchas veces dejarme un "pellejito" (como dice el menor de mis hermanos), esos padrastros que parecen insignificantes pero que a uno le molesta cual si fuera piedrita en el zapato. Se me atoraban con la ropa, me rayaba los brazos, me molestaba, podía sentir que algo no estaba en su lugar, me daba nervios pasar mis dedos y que algo estuviera mal, ¡eso no debería estar ahí!. Esto automáticamente conseguía meter ese dedo una vez mas a la boca, para quitar, arrancar de una vez por todas ese molesto padrastro... y de paso seguir mordiéndome las uñas. Si hay algo aprendido de esto y ahora aconsejo es nunca quitarse un padrastro con la boca, en ocasiones se te pasa la mano, te sangras y te quedas con un dolor horrible. No insoportable; pero si fastidioso.

Morderse las uñas puede pasar de ser una inocente manía a un caso verdaderamente extremo. Poco a poco tus uñas se vuelven pequeñas y ya no puedes rascar, llegas a tener los dedos un poco chatitos como la imagen. Casi llego a ese nivel, pero no. 

Justo un año antes de terminar la universidad, decidí poner mi mayor esfuerzo y tratar de dejar esa manía. Mis primeros intentos duraban apenas un par de días y regresaba al habito, después ya no eran días sino semanas, y eso se fue convirtiendo poco a poco en meses. Para hacérmelo un poco fácil seguía esa frase de "hoy no, tal vez mañana lo haga, pero hoy no". No recuerdo haber recurrido a algun truco de esos que tanto hay por internet para dejar de morderse las uñas, alguna vez una compañera me dijo; ponte ajo.

Por eso justo cuando abrí el blog escribí cuasi curada de onicofagia, me encontraba en ese periodo de fuerza de voluntad. Hoy... después de casi 5 años de haber salido de la universidad; ya puedo decir que he superado esa manía. De hecho a veces pienso; posiblemente era producto de mis nervios, estrés, de las preocupaciones como alumna, porque cuando salí de la facultad se me hizo bastante mas fácil ya no morderme las uñas. Aunque en ese entonces si alguien me preguntaba ¿por que? solía responder con un no se, de verdad sentía que el estrés y los nervios lo canalizaba de otra manera. 

Hubo una temporada en que me las deje crecer y por primera vez en mi vida me las pinte y las presumí con algún decorado coqueto. Pero... porque hay un pero, descubrí que tengo las uñas muy aguadas (no todo es miel sobre hojuelas) no se si es herencia o el hecho de que nunca me las deje crecer, quien sabe, se me doblan fácilmente y así no puedo. Agréguenle también el hecho de que me resulta terriblemente difícil hacer mis cosas, desde agarrar un objeto hasta bañarme, es complicado... de verdad. Eso me trae a la memoria existe una persona Shridhar Chillal del estado de Maharashtra, India posee el record mundial de las uñas mas largas del mundo, ¿como es que las cuidaba y logro increíble hazaña? Y aun mas interesante ¿como hace sus cosas cotidianas?

Regresando al tema; otra de las razones por las cuales no paso mucho tiempo con uñas largas es porque en varias ocasiones termino arañando al menor de mis hermanos cuando intenta pasarme algo, solo me dice; ¡ay tu uña! (Y yo me echo a reír 😂) pero no solo a el; yo misma me he lastimado. En mi caso realmente es complicado.

Así ya lastimo

Aunque ya no me muerdo las uñas, si prefiero la mayor parte del tiempo mantenerlas cortas por las razones que mencione antes. Ahora están un poquito largas, pienso y pienso en dejármelas crecer de nuevo otro poquito mas, pero ya así como las tengo es un suplicio...

De lo que si me siento orgullosa es poder haberme quitado esa manía, es un poco difícil al inicio pero la voluntad debe pesar mas. Ya no me muerdo las uñas, pero aun hago algo parecido a Augustus Waters "te colocas el arma asesina en los dientes pero no le concedes el poder de matarte". Me gusta de pronto poner mis uñas entre los dientes para sentir que ¡yo tengo el poder! 🗡 (Y el universo ya esta protegido😆). Ver que puedo vencer a mi enemigo es gratificante.